Al usar cinta personalizada es fácilmente identificable si el embalaje ha sido manipulado o no ya que si el embalaje llega a destino con otro precinto diferente al de origen es signo de manipulación evidente.

El precinto impreso potencia de una forma económica la imagen de nuestro negocio. Sin hacer un desembolso elevado, estamos dando a conocer una imagen o marca mientras que facilitamos el contacto a aquellos clientes que pudieran estar interesados en el producto o servicio. Además, se está aportando una ventaja competitiva sobre la competencia ya que estamos diferenciando aún más el producto con respecto al de los demás.

El precinto impreso favorece la identificación rápida y cómoda de los diferentes artículos de la empresa.

Es un material de un coste razonable ya que aporta una serie de ventajas (seguridad, publicidad, diferenciación, identificación de mercancía, etc.) que justifican su precio.